1. LIMPIAR.
Los muebles suelen cubrirse con barniz o pintura para su buen acabado. Eliminar esas capas de barniz o pintura es esencial para poder comenzar la restauración del mueble de madera.
Para recuperar el aspecto original del mueble, usaremos un decapante. Este producto se aplicará con una brocha, realizando movimientos circulares sobre la superficie, hasta cubrirla.
Sobre los tiempos de aplicación, se deberán seguir las instrucciones del fabricante o las del vendedor de nuestra tienda de bricolaje.
Para retirar el decapante, se usará una simple espátula.
Para finalizar la limpieza del mueble, se puede pasar sobre este, una lana de acero impregnada en alcohol. Esto eliminará cualquier resto de grasa y decapante que puedan haber quedado en el mueble.
2. PREPARACIÓN DE LA MADERA.
La preparación de la madera del mueble para su restauración, se realiza con una simple lija de grado medio. Puede resultar de ayuda usar un taco cubierto con la lija para facilitarnos el trabajo y no dañarnos las manos.
El lijado se llevará a cabo siempre en el sentido de la veta. De esta forma nos aseguraremos no producir daños sobre la madera.
Para finalizar el lijado, se debe retirar el polvo con un trapo seco.
3.ELIMINAR PARÁSITOS.
Es muy posible que el mueble a restaurar esté infectado por carcoma. Para eliminarla deberemos usar un insecticida para carcoma, que aplicaremos con una jeringuilla en todos los agujeros que veamos en la madera.
Para asegurarnos de que acabamos con la carcoma, es útil dar una capa del producto insecticida por todo el mueble.
4.REPARAR LA SUPERFICIE.
Cuando el mueble se haya secado, se debe reparar la superficie, rellenando los orificios de la carcoma y las posibles grietas y golpes producidos con el tiempo.
Para hacerlo, usaremos una cera de emplastecer, que aplicaremos con un formón. Una vez seca la cera, se elimina el sobrante con el mismo formón.
Se deberá proceder de nuevo al lijado del mueble, hasta que la superficie quede perfectamente lisa.
5.ACABADO DE LA RESTAURACIÓN CON TINTE, BARNIZ O PINTURA.
Para finalizar la restauración del mueble, deberemos elegir el acabado deseado y proceder a aplicarlo siguiendo las instrucciones del fabricante y los consejos del vendedor del producto.
El teñido del mueble consiste en aplicar un tinte al agua sobre la madera. Se puede llevar a cabo con una brocha y siempre en el sentido de la veta.
Si queremos pintar o barnizar el mueble restaurado, es necesario aplicar un tapaporos para impermeabilizar la pieza y protegerla. Se aplicará con una brocha y tras la aplicación se deberá pasar una lija media y eliminar el polvo con un trapo.
Para pintar, deberemos escoger una pintura adecuada para madera y aplicarla con una brocha en el sentido de la veta. Se pueden aplicar varias capas de pintura según el acabado deseado. Tras cada capa se debe pasar una lija media y limpiar el polvo con un trapo.
El barniz es necesario para un buen acabado final de la restauración del mueble y la protección de la pieza. Se aplicará con una brocha plana, dando pasadas largas de un extremo a otro de la superficie a tratar. Tras el proceso se lijará la superficie y se limpiará el polvo con un trapo.
Para recuperar el aspecto original del mueble, usaremos un decapante. Este producto se aplicará con una brocha, realizando movimientos circulares sobre la superficie, hasta cubrirla.
Sobre los tiempos de aplicación, se deberán seguir las instrucciones del fabricante o las del vendedor de nuestra tienda de bricolaje.
Para retirar el decapante, se usará una simple espátula.
Para finalizar la limpieza del mueble, se puede pasar sobre este, una lana de acero impregnada en alcohol. Esto eliminará cualquier resto de grasa y decapante que puedan haber quedado en el mueble.
2. PREPARACIÓN DE LA MADERA.
La preparación de la madera del mueble para su restauración, se realiza con una simple lija de grado medio. Puede resultar de ayuda usar un taco cubierto con la lija para facilitarnos el trabajo y no dañarnos las manos.
El lijado se llevará a cabo siempre en el sentido de la veta. De esta forma nos aseguraremos no producir daños sobre la madera.
Para finalizar el lijado, se debe retirar el polvo con un trapo seco.
3.ELIMINAR PARÁSITOS.
Es muy posible que el mueble a restaurar esté infectado por carcoma. Para eliminarla deberemos usar un insecticida para carcoma, que aplicaremos con una jeringuilla en todos los agujeros que veamos en la madera.
Para asegurarnos de que acabamos con la carcoma, es útil dar una capa del producto insecticida por todo el mueble.
4.REPARAR LA SUPERFICIE.
Cuando el mueble se haya secado, se debe reparar la superficie, rellenando los orificios de la carcoma y las posibles grietas y golpes producidos con el tiempo.
Para hacerlo, usaremos una cera de emplastecer, que aplicaremos con un formón. Una vez seca la cera, se elimina el sobrante con el mismo formón.
Se deberá proceder de nuevo al lijado del mueble, hasta que la superficie quede perfectamente lisa.
5.ACABADO DE LA RESTAURACIÓN CON TINTE, BARNIZ O PINTURA.
Para finalizar la restauración del mueble, deberemos elegir el acabado deseado y proceder a aplicarlo siguiendo las instrucciones del fabricante y los consejos del vendedor del producto.
El teñido del mueble consiste en aplicar un tinte al agua sobre la madera. Se puede llevar a cabo con una brocha y siempre en el sentido de la veta.
Si queremos pintar o barnizar el mueble restaurado, es necesario aplicar un tapaporos para impermeabilizar la pieza y protegerla. Se aplicará con una brocha y tras la aplicación se deberá pasar una lija media y eliminar el polvo con un trapo.
Para pintar, deberemos escoger una pintura adecuada para madera y aplicarla con una brocha en el sentido de la veta. Se pueden aplicar varias capas de pintura según el acabado deseado. Tras cada capa se debe pasar una lija media y limpiar el polvo con un trapo.
El barniz es necesario para un buen acabado final de la restauración del mueble y la protección de la pieza. Se aplicará con una brocha plana, dando pasadas largas de un extremo a otro de la superficie a tratar. Tras el proceso se lijará la superficie y se limpiará el polvo con un trapo.